Pauranika Kalah (El tiempo puránico).
- Narayana Putra
- 12 sept 2022
- 11 Min. de lectura

El tiempo puránico.
La noción del tiempo en el hinduismo es completamente única en el mundo, y aunque ha sufrido cambio y desarrollo con el pasar de los siglos, es en los Puranas donde alcanza su total madurez. Los Puranas son antiguos textos de la tradición hindú; si bien, su forma actual data desde las primeras centurias d.c hasta casi el siglo XI, el material que contienen es mucho más antiguo. Es más, la tradición considera que las distintas capas del contenido puránico van tan atrás que alcanzan los tiempos ideales, los tiempos inmemoriales e incluso los tiempos atemporales.
Kalah es la voz sánscrita que encapsula la idea de tiempo, y como toda buena palabra sánscrita es altamente polisémica. Kalah es tiempo, destino, eternidad, no eternidad (temporalidad), vida y muerte. En Kalah existen los tres tiempos: el de crear, el de preservar, y el de la destrucción. Los Puranas nos enseñan que Kalah en si mismo es un concepto eterno -a pesar de que su función es regir lo efímero. Este tiempo, que podemos llamar ''tiempo puránico'' no es lineal, sino cíclico. Veamos pues su descripción teórica:
En un ciclo –o tiempo cíclico- un fin indica un principio y el principio desemboca, inevitablemente, en otro fin, para así repetirse continuamente. Por lo tanto, al pensar en este tiempo utilizaré la metáfora de un reloj mecánico. Entonces, imaginemos que este tiempo es un reloj redondo al cual despojamos de su tapa para revelar los engranajes del mecanismo. Al destaparlo se puede ver que hay un engranaje –obviamente circular- que es el más grande y que dentro de sí contiene engranajes más pequeños, este engranaje mayor es la rueda del tiempo. Los engranajes pequeños están el uno dentro del otro, conforme el tamaño, hasta llegar a engranajes de tamaño minúsculo. Esta rueda siempre gira constantemente a la misma dirección e igualmente los engranajes pequeños giran con ella, pero a mayor velocidad; de modo tal, que los pequeños ya habrán dado muchas vueltas para el momento en que los de mayor tamaño logren un giro completo. Así pues el tiempo puránico es un gran ciclo que contiene en sí mismo un conjunto de ciclos, que se contienen entre sí según el tamaño, los cuales se repiten una y otra vez, de acuerdo a sus velocidades, en un flujo constante. Los ciclos más pequeños provocan la revolución de los más grandes hasta llegar a la rueda del tiempo. Y así como los engranajes solo giran dentro del reloj, en el tiempo puránico también existe un tiempo fuera del tiempo –o del reloj-, que no gira, que no se siente y que es inmanifiesto.´´(Bustos, John. 2019)*
La elocuencia de los Puranas con respecto al tiempo es asombrosa y detallada. Por consiguiente, describiré brevemente las categorías (engranajes) según la cual se comprende esta dimensión. La medidas puede dividirse en tres grupos: pequeñas, medianas y grandes.
Medidas pequeñas.
Las medidas pequeñas incluyen a todas aquellas menores a un día solar. De hecho, dependen del fenómeno luz-oscuridad - causado por la rotación terrestre- para considerarse efectivas, ya que, toda medición temporal debe ajustarse al actuar de la naturaleza. Estás medidas minúsculas se dividen en dos agrupaciones, producto de dos escuelas diferentes, según las cuales calcular el paso del tiempo. Estas clasificaciones son aquella del átomo (Anu) y aquella del parpadeo (Nimeṣa).
El cálculo del tiempo según el átomo se basa en el concepto de un continuum espacio-tiempo. El tiempo solo es perceptible en relación a los movimientos de la materia en el espacio, puesto que la materia ocupa distintos lugares en sucesión y no simultáneamente. Al conocer las posiciones pasadas de la materia se infiere un pasado, al reconocer la posición actual se descubre el presente, y al suponer una posición venidera se especula el futuro.
El sol es el marco de referencia por excelencia de un objeto en movimiento en el espacio-tiempo. Por ello, se puede calcular el paso del tiempo al teorizar el espacio recorrido que ocuparía la integración de un número determinado de átomos. Se hipotetiza que la integración de un átomo con otro átomo forma un átomo doble, y tres átomos dobles crean un hexátomo, conocido como Trasareṇu. El Trasareṇu es visible al ojo humano como la partícula más pequeña que podemos percibir. A partir de ella, se suma la posible cantidad de átomos integrados en el espacio recorrido por el Sol en intervalos minúsculos, hasta medir el movimiento completo del astro por la bóveda celeste -e incluso fuera de ella, durante la noche- que en nuestra medición de tiempo corresponde a 1440 minutos. Veamos la siguiente tabla de medidas:
1. Según el átomo:
(De acuerdo al Bhāgavata Purāṇa y Brahma-vaivarta Purāṇa)
a. Trasareṇu: 1/1687.5 segundos (0.00059259259 segundos).
b. Truti: 3 Trasareṇu - 0,00178 segundos.
c. Vedha:100 Truti - 0,0592 segundos.
d. Lava: 3 Vedha - 0,117 segundos.
e. Nimeṣa: 3 Lava - 0,53 segundos.
f. Kṣaṇa: 3 Nimeṣa -1,6 segundos.
g. Kāṣṭhā: 15 Kṣaṇa - 8 segundos.
h. Laghu: 5 Kāṣṭhā - 2 minutos.
i. Nāḍika o Daṇḍa: 15 Laghu - 30 minutos.
j. Muhūrta: 2 Daṇḍa - 60 minutos.
El cálculo del tiempo según el parpadeo es más sencillo. Este es basa en la estandarización de un movimiento corporal ínfimo, el cual es el parpadear involuntario del ojo humano. De ahí se razona matemáticamente la cantidad de posibles parpadeos estándar, en medidas cada vez mayores hasta corresponder con el ciclo de luz-oscuridad ligado a los movimientos del Sol en el firmamento. Véase la siguiente tabla:
2. Según el parpadeo:
(De acuerdo al Viṣṇu Purāṇa, Pādma Purāṇa, Nārada Purāṇa, Matsya Purāṇa, Śiva Purāṇa, Vāyu Purāṇa, Mahābhārata y Manu Saṁhita*)
a. Nimeṣa: 0,212 segundos.
b. Kāṣṭhā:15 Nimeṣa - 3,18 segundos *(segun el Manu Saṁhita son 18 Nimeṣa).
c. Kalā: 30 Kāṣṭhā -1,6 minutos.
d. Muhūrta: 30 Kalā - 48 minutos.
Existen sistemas híbridos entre el átomo y el parpadeo, puesto que presentan medidas comunes entre el uno y el otro. No obstante, esto puede que se deba a estados transitorios entre ambos sistemas, ya que se cree que el sistema del parpadeo es más antiguo, y que el del átomo -siendo el más reciente- es más preciso y sofisticado. Algunas variaciones así lo representan:
2.2 Variación I según el Śiva Purāṇa:
a. Kṣaṇa: N/A* (N/A: no calculable por falta información en la fuente)
b. Truti: N/A
c. Lava: N/A
d. Nimeṣa: 0,212 segundos.
e. Kāṣṭhā: 15 Nimeṣa -3,18 segundos.
f. Muhūrta: 48 minutos.
2.3 Variación II según el Vāyu Purāṇa:
a. Nimeṣa: 0,212 segundos.
b. Kāṣṭhā:15 Nimeṣa -3,18 segundos.
c. Kṣaṇa: N/A.
d. Lava: N/A.
e. Kalā: N/A.
f. Muhūrta:30 Kalā - 48 minutos.
Medidas Medianas.
Las medidas medianas son aquellas que superan la duración de un día -con su noche. Estas también están ligadas a fenómenos naturales, que además del Sol incluyen también la luna y los cambios estacionales. Es decir, la instrumento de medición ahora incluye la translación terrestre al rededor del Sol. Si bien, existe un calendario lunar -asociado a la vida ritual- que es bastante complejo y se solapa con el calendario solar, no hablaré mucho de aquel, pues su alcance es limitado para el cálculo de medidas de mayor tamaño, de importancia mítico-histórica. El sistema del átomo y aquel del parpadeo se unifican al llegar a la medida de un día (sin su noche).
1. Según el átomo:
a. Prahara o Yāmas: 6 Daṇḍa o 3 Muhūrta - 180 minutos.
b. Divasa [día] (humano): 4 Prahara -12 horas.
c. Ratri [noche] (humana): 4 Yāmas - 12 horas.
2. Según el parpadeo:
a. Divasa [día] (humano): 15 Muhūrta - 12 horas.
b. Ratri [noche] (humana):15 Muhūrta - 12 horas.
3. Según ambos sistemas unificados:
(según los 18 Mahā-Purāṇa)
a. Ahoratra [día y noche] (humano): 24 o 30 Muhūrta - 24 horas.
b. Pakṣa (quincena): 15 días y noches -15 días.
c. Masa (mes): 2 Pakṣa - 30 días.
d. Pitri ahoratra (día y noche - ancestros): 2 Pakṣa - 30 días.
e. Estación: 2 meses - 60 días.
f. Ayaṇa (semestre - movimiento solar): 6 meses - 180 días.
f.1. Uttarāyaṇa (movimiento en el norte).
f.2. Dakṣināyana (movimiento en el sur).
g. Saṁvatsara (año): 2 Ayaṇa - 360 días.
h. Daiva ahoratra (día y noche - divinos): 2 Ayaṇa - 360 días.
i. Año divino: 360 días divinos - 360 años.
Todas las medidas vistas hasta antes del día-noche divino son medidas cotidianas, mundanas incluso si podría decirse, ya que, están relacionadas a las actividades del cuerpo, tales como el trabajo y el reposo, etc. Sin embargo, son un buen punto de partida para los grandes cálculos temporales, cuyo objetivo y alcance superan sin duda el mero carácter practico de la medición del tiempo. El año divino es la medida base para aquellas computaciones. Para facilitar su comprensión, las cantidades otorgadas en años divinos deben multiplicarse por 360 para dar con su contraparte en años humanos.
Medidas grandes (1).
Sin duda el aspecto más característico del tiempo puránico es sus sistema de eras o Yuga. Es con ellas donde su aspecto cíclico se comienza a evidenciar, pues las medidas pequeñas y medianas se limitan al entendimiento practico-cotidiano del tiempo; las medidas grandes, en cambio, se proyectan hacia lo cosmológico y lo sagrado. Shrishti o la manifestación universal es dominada por el tiempo, el cual hace que sus tres calidades se alternen. Estas tres cualidades (Traiguna) dan lugar a los tres momentos-estado: la creación, la preservación y la destrucción. La sucesión de Yugas no es sino la alternancia de los tres momentos-estado, pero como el actuar del tiempo es ilimitado, la destrucción nunca es definitiva, sino que desemboca en la creación y el ciclo continua con sus revoluciones eternamente.
La primera era de cuatro es el tiempo ideal, casi perfecto, en donde el cosmos es tal como debería ser, pues en él reina la cualidad de la virtud (sattva). En las eras sucesivas se introducen porciones de la cualidad intermedia (rajas) -creadora pero problemática- hasta que en la era final reina la cualidad inferior (tamas), y el mundo degenera hasta su punto más bajo. Con el fin de la cuarta era, el universo se renueva y sattva vuelve a reinar. Cada era es más corta que la anterior en un cuarto de su duración. Normalmente, los Puranas no calculan estos tiempos largos en años humanos, en su lugar, se utilizan los años divinos. Cada era posee dos periodos transicionales llamados Sandhya (alba) y Sandhyansa (ocaso).
(según los 18 Mahā-Purāṇa)
1. Satya-yuga:
a. Años divinos: 400 (Sandhya) + 4.000 (Yuga) + 400 (Sandhyansa)= 4.800 años.
b. Años humanos: 1.728.000 años.
2. Tretā-yuga:
a. Años divinos: 300 (Sandhya) + 3.000 (Yuga) + 300 (Sandhyansa)= 3.600 años.
b. Años humanos: 1.296.000 años.
3. Dvāpara-yuga:
a. Años divinos: 200 (Sandhya) + 2.000 (Yuga) + 200 (Sandhyansa)= 2.400 años.
b. Años humanos: 864.000 años.
4. Kali-yuga:
a. Años divinos: 100 (Sandhya) + 1.000 (Yuga) + 100 (Sandhyansa)= 1.200 años.
b. Años humanos: 432.000 años.
Medidas grandes (2).
(según los 18 Mahā-Purāṇa, a menos que se indique lo contrario)
La suma de las cuatro eras conforma una Maha-yuga o gran era.
1. Mahā-yuga o Catur-yuga: Satya-yuga (4.800) + Tretā-yuga (3.600) + Dvāpara-yuga (2.400) + Kali-yuga (1.200).
a. Años divinos: 12.000 años.
b. Años humanos: 4.320.000 años.
El Brahma-vaivarta Purāṇa propone el concepto de Yuga divino, otorgándole el mismo ratio que al año humano en cuanto al año divino (1/360). Sin embargo, este concepto no encaja bien con las medidas más voluminosas que el sistema puránico estándar describe; y es por lo tanto, ignorado por la gran mayoría de las fuentes.
1.2 Variación I según el Brahma-vaivarta Purāṇa:
a. Yuga o era divina: 360 Mahā-yugas.
Un Manvāntara corresponde a un ciclo más largo de tiempo. En él se renuevan la gran mayoría de entidades vivientes. Los puestos de dioses, patriarcas, seres divinos, mundanos e infernales son ocupados por seres diferentes a aquellos del ciclo anterior, de acuerdo a su karma y los giros del Samsara. Al final de cada Manvāntara se efectúa una disolución parcial (pralaya). En el giro actual del tiempo se han sucedido 7 de estos ciclos, y se espera que ocurran otros siete, antes de que el engranaje vuelva a su posición inicial.
2. Manvāntara: 71 Mahā-yugas más algunos años adicionales.
a. Años divinos: 852.000 años aproximadamente.
b. Años humanos: 306.720.000 años.
2.2 Manvāntaras del Vārāha-Mahā-Kalpa:
(dados en tiempo pasado hasta el presente)
1. Svāyambhuva Manvāntara: hace 1.960.320.000 años humanos aprox.
2. Svārociṣa Manvāntara: hace 1.653.600.000 años humanos aprox.
3. Uttama Manvāntara: hace 1.346.880.000 años humanos aprox.
4. Tāmasa Manvāntara: hace 1.040.160.000 años humanos aprox.
5. Raivata Manvāntara: hace 733.440.000 años humanos aprox.
6. Cākṣuṣa Manvāntara: hace 426.720.000 años humanos aprox.
7. Vaivasvata Manvāntara: hace 120.000.000 años aprox. y aún vigente.
8. 8°-14° Manus Savarni: pertenecen al tiempo futuro, comenzando dentro de otros 120.000.000 años humanos
El Kalpa se conoce como el día cósmico, en el que el orden del universo llega a ser y deja de ser. Se dice que es un día pues corresponde a una jornada de la forma creadora del Ser Supremo (Brahmā). Al fin de cada Kalpa ocurre la disolución incidental (Naimittika pralaya). Los mundos son destruidos y los seres re-absorbidos en el Ser Supremo (Samhara). El universo permanece en estasis por un periodo igual a un Kalpa. Al final de este tiempo surge un nuevo Kalpa y el universo es creado otra vez.
3. Kalpa: 14 Manvāntaras.
a. Años divinos: 12.000.000 años.
b. Años humanos: 4.320.000.000 años.
4. Brahmā ahoratra (día y noche de Brahmā): 2 Kalpas.
a. Años divinos: 24.000.000 años.
b. Años humanos: 8.640.000.000 años.
Finalmente, está el giro más grandes de la ruda del tiempo (Kala-cakra): la duración entera de un universo manifestado (Para) -la cual se divide en dos partes (Para-ardha). Está duración está ligada a la expresión activa del Ser Supremo como Brahmā. Tras cumplirse el tiempo, Él se absorbe en si mismo, retirando de tal manera la semilla fecundadora de la materia. La materia infecunda regresa a su estado original inmanifiesto, y el cosmos deja de ser por completo, esta es la disolución elemental (Prakritika pralaya). Con todo, el final definitivo de una creación no implica un vacío permanente, ya que así como un universo termina otro comienza, esto sucede sucesivamente y simultáneamente -sí, eso implica la existencia de universos paralelos, en constante creación, preservación y disolución.
5. Parārdha: 36.000 Kalpas o 50 años de Brahmā.
a. Años divinos: 432.555.555.555 años aprox.
b. Años humanos: 155.720.000.000.000 años aprox.
6. Para: 2 Parardha o 100 años de Brahmā.
a. Años divinos: 865.111.111.111 años aprox.
b. Años humanos: 311.440.000.000.000 años.
Las escuelas sivaítas y shaktas, proponen otros giros de tiempo aún superiores, aunque estos no son aceptados universalmente en el conocimiento puránico. Estas variaciones dilatan las medidas a campos incalculables, y números tan extensos en tiempo humano que no valdría la pena escribir -y porque carezco de la habilidad matemática para calcularlos y definirlos como se debería. Lo que es importante es saber que se tratan de tiempos divinos, más allá del universo perceptible e incluso del sutil, es decir, pertenecen al ámbito de lo sublime.
6.1 Variación I (según el Śiva Purāṇa y el Vāyu Purāṇa).
a. Año de Brahmā: 1.000 Kalpas.
b. Brahmā Yuga: 8.000 años de Brahmā.
c. Brahmā Savana: 1.000 Brahmā Yuga.
d. Vida de Brahmā: 3.003 Brahmā Savanas, 6.000 Savanas según el Vāyu Purāṇa.
6.2 Variación II (según el Brahma-vaivarta Purāṇa).
a. Para: 108 años de Brahmā
6.3 Variación III (según el Brahma-vaivarta Purāṇa).
a. Prakṛti Nimeṣa: 1 Para.
b. Prakṛti Daṇḍa: 1.000 Prakṛti Nimeṣa.
c. Día de Prakṛti: 60 Prakṛti Daṇḍa.
d. Prakṛti Saṁvatsara: 360 días de Prakṛti.
e. Ciclo de Prakṛti: 100 Prakṛti Saṁvatsara.
6.4 Variación IV (según el Matsya Purāṇa).
a. Día de Śiva: 20 años de Brahmā.
b. Śiva Saṁvatsara: 360 días de Śiva
c. Viṣṇu Nimeṣa: 100 Śiva Saṁvatsara.
Medida del Tiempo Absoluto.
(en realidad inconmensurable)
Así como cuando un río llega al mar, se funde con él y pierde su condición de río, ganando la del mar, igualmente el tiempo desemboca en el absoluto -del cual proviene originalmente. En el Absoluto el tiempo se difumina, se pierde y desaparece. Allí solo existe en potencia, pues en la causa residen todos los efectos. La duración entera de un universo es tan solo un parpadeo del Ser Supremo (Viṣṇu). Cuando Él parpadea, o en uno solo de sus suspiros, incontables universos surgen y se disuelven, y para Él no hay limite y medida. Lo que está más allá de esto es inefable e incomprensible. Solo lo sagrado revela lo sagrado. Toda alma puede llegar a este punto al alcanzar la disolución final (Antyantika pralaya), también llamada Moksha.
1. Viṣṇu Nimeṣa: 1 Para o 311.440.000.000.000 años.
Desde el Viṣṇu Nimeṣa en adelante solo existe la eternidad, por lo tanto, aquí acaba cualquier cálculo del tiempo.
Aquel que conoce el tiempo ve más allá del tiempo, y obtiene la liberación.
Hari Om Tat Sat.
* - Bustos, John. (2019) Kalā śāstraśca: el tiempo y la escritura sagrada en el hinduismo. Bogotá. Universidad Nacional de Colombia.
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